Calidad del aire, la gran prioridad
Tras la pandemia del coronavirus los consumidores le dan gran relevancia a este aspecto. Y es que los datos hablan por sí solos: en 2020, primer año del COVID en el mundo, las compras de purificadores consiguieron crecimientos de vértigo, de más del 500%. Este ratio ya no es tan abrumador en 2022, pero esta necesidad sigue siendo prioritaria para el consumidor común a la hora de adquirir su sistema de climatización.
Equipos de climatización responsables con el medio ambiente
Es por todos sabidos que nuestro planeta está más perjudicado que nunca, prueba de ello son las graves consecuencias que estamos sufriendo a raíz del perjudicial ‘cambio climático’. En lo que a los sistemas de climatización respecta, ya se está trabajando concienzudamente por hacerlos lo más sostenibles posibles.
Así pues, el foco está puesto en los nocivos gases refrigerantes que todavía muchos sistemas domésticos de climatización siguen usando a día de hoy. Aunque la industria ya ha ido introduciendo en el mercado aparatos de aire acondicionado que eliminan los más perjudiciales, los desarrollos tienen que seguir evolucionando hacia opciones mucho más naturales y ecológicas. Por ejemplo, el novedoso R-32 es un gas tan puro que podría conseguir reducir los daños producidos actualmente en el medio ambiente en hasta más de la mitad.
Conectividad y domótica
Con la óptima integración de conexiones WiFi, el consumidor puede ajustar los parámetros que desee, porcentaje de humedad, temperatura media de la calefacción… mediante el uso de su propio dispositivo móvil. Así de fácil. Aplicaciones desde luego sencillas y muy intuitivas que permiten el control directo del propietario sobre su aire acondicionado o calefacción, pero que también sirven para dar valor a los servicios de atención al cliente de las marcas o compañías instaladoras.