La Guardia Civil ha alertado que algunos gases provenientes de hidrocarburos están siendo introducidos y comercializados a través de diversos canales en línea. Estos productos, que se presentan como gases refrigerantes «ecológicos» y exentos de impuestos sobre gases fluorados, no cumplen con esas características. Aunque se promocionan como tales, su uso en sistemas de refrigeración y climatización está prohibido, ya que no están aprobados para dichas aplicaciones.
A pesar de ser presentados como una opción más económica frente a los tradicionales y seguros gases fluorados como el R-410A, la utilización de estos productos está completamente prohibida y sancionada en España. Estos compuestos no están reconocidos por el Reglamento de Seguridad de Instalaciones Frigoríficas (RSIF) y son altamente inflamables, lo que los hace inadecuados para equipos diseñados originalmente para utilizar gases refrigerantes inertes.
CONAIF ha ofrecido algunas recomendaciones para ayudar a los instaladores a identificar estos productos y evitar adquirirlos como sustitutos de los HFCs:
- Los denominados gases «ecológicos» suelen tener un nombre comercial particular, pero no cuentan con la nomenclatura estándar que poseen los refrigerantes autorizados, como el R-410A o el R-32.
- No están incluidos en la Tabla A del apéndice 1 de la Instrucción 2 del RSIF.
- Son completamente diferentes de los gases refrigerantes aprobados por el Ministerio de Industria y Turismo, como el R-290 (propano) o el R-600 (butano). Estos gases hidrocarburos nunca se anuncian como reemplazos para gases como el R-410A, ya que los equipos que los usan deben tener características técnicas específicas para reducir el riesgo de incendio.
- Los gases refrigerantes autorizados incluyen en sus fichas de seguridad una descripción precisa de su composición. En contraste, los gases «ecológicos» ofrecen información vaga e imprecisa sobre el contenido mínimo o máximo de sus componentes.
Operación de la Guardia Civil
Recientemente, en la operación «Ecogas», la Guardia Civil confiscó 30 toneladas de estos gases «ecológicos» derivados de hidrocarburos. Durante esta operación, se detuvo a seis personas y se investiga a una séptima en las provincias de Valencia, Granada, Alicante y Lleida por la venta fraudulenta de estos gases refrigerantes. La Guardia Civil ha señalado que, en los últimos meses, se ha detectado un aumento en incendios relacionados con aires acondicionados debido al uso indebido de estos gases, dada su naturaleza altamente inflamable.
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